En el panorama actual de la transición energética, la producción de hidrógeno emerge como un pilar fundamental en la búsqueda de fuentes de energía más limpias y sostenibles. Dos de los métodos principales para obtener hidrógeno son la producción por vía electroquímica y por vía térmica. Ambos procesos tienen sus particularidades y aplicaciones específicas que es importante entender en profundidad.

Producción de Hidrógeno por Vía Electroquímica:

La vía electroquímica es un proceso en el cual la electricidad se utiliza para descomponer una fuente de agua o un compuesto que contenga hidrógeno en sus componentes básicos, hidrógeno (H2) y oxígeno (O2). Dos de los métodos más comunes son la electrólisis del agua y las pilas de combustible.

Electrólisis del Agua:

Uno de los procesos más conocidos y utilizados en la producción de hidrógeno por vía electroquímica es la electrólisis del agua. Este proceso implica pasar una corriente eléctrica a través de una solución de agua o vapor de agua, lo que resulta en la separación del agua en hidrógeno en el cátodo y oxígeno en el ánodo.

Este proceso es eficiente y produce hidrógeno puro, lo que lo hace adecuado para aplicaciones donde se requiere hidrógeno de alta pureza, como la industria química o la industria de semiconductores. Además, la electrólisis del agua se puede alimentar con electricidad generada a partir de fuentes renovables, lo que la convierte en una forma sostenible de producir hidrógeno, conocido como "hidrógeno verde".

Pilas de Combustible:

Un método importante de producción de electricidad a partir de hidrógeno por vía electroquímica involucra las pilas de combustible. En este caso, las pilas de combustible utilizan hidrógeno y oxígeno del aire para producir electricidad, agua y calor como subproductos. Las pilas de combustible se utilizan en aplicaciones de generación de energía y vehículos de hidrógeno.

Este proceso es altamente eficiente y no produce emisiones de carbono cuando se utiliza hidrógeno producido a partir de fuentes limpias. Las pilas de combustible son especialmente adecuadas para aplicaciones de movilidad, ya que ofrecen una forma rápida y eficiente de convertir hidrógeno en electricidad para alimentar vehículos eléctricos de pila de combustible.

Producción de Hidrógeno por Vía Térmica:

Por el contrario, la producción de hidrógeno por vía térmica implica el uso de calor en lugar de electricidad. Un método común es la reforma de vapor, en el cual un hidrocarburo, como el gas natural, se combina con vapor de agua a alta temperatura en presencia de un catalizador para producir hidrógeno y monóxido de carbono (CO).

Luego, el monóxido de carbono se puede eliminar para obtener hidrógeno puro. Este método es ampliamente utilizado en la industria para la producción de hidrógeno a gran escala.

Otro método térmico es la pirólisis, que descompone compuestos orgánicos a altas temperaturas en ausencia de oxígeno para obtener hidrógeno y otros productos gaseosos. Aunque menos común que la reforma de vapor, la pirólisis tiene aplicaciones en la producción de hidrógeno a partir de residuos orgánicos y biomasa.

Complementariedad de las Tecnologías:

La elección entre la producción de hidrógeno por vía electroquímica y vía térmica depende de diversos factores, como la disponibilidad de recursos, la eficiencia energética y el impacto ambiental. En la actualidad, se observa un enfoque en la complementariedad de estas tecnologías en lugar de una competencia directa.

La producción de hidrógeno por vía electroquímica, como la electrólisis del agua, se utiliza en aplicaciones donde se requiere hidrógeno de alta pureza y se dispone de electricidad generada a partir de fuentes renovables. Esto es fundamental para la producción de "hidrógeno verde", que es esencial para reducir las emisiones de carbono en industrias como la química y el transporte.

Por otro lado, la producción de hidrógeno por vía térmica, como la reforma de vapor, es adecuada para aplicaciones a gran escala y se utiliza en industrias donde se necesita hidrógeno como materia prima, como la industria química y la refinación de petróleo.

Investigación en CIC energiGUNE:

En este contexto de complementariedad de tecnologías, centros de investigación y desarrollo desempeñan un papel crucial en la búsqueda de soluciones energéticas sostenibles. CIC energiGUNE es un ejemplo destacado que se dedica a investigar y desarrollar nuevas tecnologías tanto por vía electroquímica como por vía térmica.

En resumen, la diferencia entre la producción de hidrógeno por vía electroquímica y vía térmica radica en los procesos fundamentales que utilizan, ya sea electricidad o calor. Ambos enfoques tienen sus ventajas y aplicaciones específicas, y su complementariedad es esencial para abordar los desafíos de la transición energética.

En CIC energiGUNE continuamos investigando y desarrollando ambas tecnologías con el objetivo de contribuir al avance hacia un sistema energético más sostenible y limpio; un compromiso con la investigación y la innovación que es fundamental para alcanzar un futuro energético más verde y eficiente.

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